>Nombre October Kalatro >Edad 25 >Sexo El más degenerado posible >Historia Abusador, Zoofilico, Necrofilico, Coprofago, Xenofilico y Posible Pedofilo en potencia (asumiendo que ya no lo es), October es un jorgito degenerado más del montón a borde de caer en la locura eterna por obra de la medicina moderna propulsada por sangre, su mente está rota y degenerada a un punto que ya pierde la moral si tiene que saciar sus gustos carnales, aunque aún tiene la cordura suficiente para poder interactuar como un ser humano y no caer 100% en la oscuridad como una bestia más de montón. Viaja por distintos lugares del mundo hasta terminar aquí, su apariencia es bizarra y siempre está sucio, no se sabe que busca, tal vez solo busca deshumanizarse tanto al punto de poder lograr la inmortalidad, o simplemente son cuentos contados por borrachos. Tal vez muchas cosas que se sepan de él en realidad son puro mito y malformación inventadas por el mismo por las risas o sin un motivo aparente, lo unció real es que internamente está peleando con muchos demonios internos e intentado no caer en la tentación de la carne y nunca más poder salir de ese pozo sin fondo. Quien sabe. Ficha test, si el rol está bueno la desarrolló mucho mejor más adelante

Guardo cupo

>>94044 ¡Ahhh! ¡Un excelente ejemplar! Muchos últimamente no están tomando demasiado bien las nuevas transfusiones a pesar de los refinamientos y de los nuevos instrumentos bajo mi alcance... Su sangre no parece ser demasiado distinta a la de los demás forasteros, pero aún así... Estoy seguro que será una fina adición para esta eterna noche, Keh hehehehe >Tu memoria se encuentra bastante difusa, tu cabeza duele bastante, tu visión está bastante borrosa y más allá de manchas grises, mucho no puedes detallar, ni siquiera tu propia nariz. Tus oídos zumban sin descanso, y lo único que sientes en tu lengua, es el horrendo sabor del arsénico siendo derramado sobre está, envolviendola por completo, y causando un ardor muy ligero, pero que causa que tu lengua se sienta más y más y más pequeña... No recuerdas muy bien como acabaste en esta situación, tampoco logras saber de quién era aquella voz, más allá de que provenía de algún viejo, y a saber que intenciones tenía contigo... Tu cuerpo yace completamente inmóvil, por más que intentas mirar hacia un lado y hacia el otro, sin frutos ni éxito, y tus piernas y brazos no tienen sensación alguna, ¿Habrá Sido que te habrán amputado tales extremidades?... >Por un momento logras recobrar la conciencia, más todo se ve bastante borroso, únicamente puedes discernir qué estás acostado en alguna especie de camilla, más no te puedes mover debido a que te encuentras aprisionado contra la misma, debido a algunas correas apretadas en cada una de tus extremidades, cuello, e incluso frente. Cómo salidos de una pesadilla, unos extraños seres completamente deformes, bastante pequeños, cuyo cuerpo brilla en azul, empiezan a salir de los costados de aquella camilla, en poco segundos, multiplicandose más y más hasta taparte por completo, sus pequeñas y horrendas manos agarran tus piernas, pies, abdomen, brazos, manos, cuello, e incluso cara, y estos mismos pequeños dedos presionan contra tu piel con sima violencia, tratando en lo máximo posible de penetrar contra tu piel. Ni siquiera puedes gritar, por más que lo intentas, tu boca por alguna razón no se abre, y todo vuelve a una completa oscuridad, cuando aquellos pequeños seres ponen sus manos contra tu rostro, y lo último que sientes es la yema de sus dedos en los orificios de tus ojos... ... La noche apenas comienza, Joven Cazador, y las presas esperan allá afuera... No me decepcioneis, pues vuestra vida es más singular de lo que vos pensáis... ... >Poco a poco comienzas a recobrar los sentidos, al mismo tiempo que aquella voz se iba esfumando... Era un mero susurró a tu oído, de lo suave que se había escuchado, más era relativamente joven a comparación de aquella que había asaltado tus oídos previamente... Tus sentidos completos iban regresando a la normalidad, sin señal alguna de aquellos pequeños serecillos que habías visto hacia unos meros momentos atrás... ¿Habrá Sido una pesadilla?... >Estabas en aquella misma camilla que habías observado previamente, más las correas ya no te ataban ni te imposibilitaban moverte, eras completamente libre de moverte a dónde tú quisieras... Más tus venas empezaban a doler, específicamente, las de ambos brazos y muñecas, y a su vez, sentías una muy leve punzada en tu muslo derecho. Era de noche, más la misma estaba lo suficientemente clara como para poder observar sin demasiada necesidad de alguna lámpara, y por las vistas delante tuya, te encontrabas en una especie de sala o habitación muy grande, con otras cuantas camillas más puestas allí, algunas desordenadas, otras tiradas en el suelo, e incluso una con un enorme manchón de sangre, y la otra, era de dónde te ibas levantando... Esta misma tenía unas cuantas manchas provocadas por unas cuantas gotas de sangre, se veían bastante frescas, más tu ropa no se encontraba manchada en lo absoluto... >Aquella habitación contaba con una pequeña librería, así como también una pequeña lámpara de mano puesta en el portal de la puerta, aún encendida, y no muy lejos de ti, yacía una pequeña mesa con numerosos libros abiertos, otros tirados, otros desordenados, pero en medio de todo aquello, hacia una carta iluminada con una vela a media vida... >¿Dónde... Te habías metido?... >>94045 No hay problema negro, con gusto espero

>>94040 >Nombre P. >Edad 25 años. >Sexo Masculino. >Historia Yharnam tiene mucho que ofrecer y el conocimiento es algo que siempre persigo. Nacido y madurado en una ciudad del Este mi padre siempre me enseñó los modales y comportamiento adecuado para ser considerado alguien "bueno", que la gente nunca hablara y cuando pasará dijeran - Miren, es P, el hijo de Gepetto, que chico tan bien portado - Y no es la lengua delas vivirás las que me movían si no la promesa de mi padre, la promesa que rezaba sobre aquellos que de buenaventura se han hecho, hueso, carne y nervios que me permitan sentir toda sensación que el mundo pueda ofrecer pero su palabra jamás fue cumplida. Casi deseando el dolor me dirijo a este lugar tras la muerte de mi padre, si las promesas no son tan falsas como las de el al fin podré ser hombre. >Pic Es bajito, mide apenas 1.60.

>>94090 ¡Ahhh! ¡Otro especimen más! ¡Y vaya que es más peculiar que el anterior!... ¿Que secretos guarda su sangre para que su piel sea tan suave cuál mismísima seda?... Una minúscula muestra debe ser más que suficiente. Casi se siente como un desperdicio dejar ir tan fino especimen por sus anchas, así de flaco y enano, seguramente algún carruaje lo aplastaría por error... Pero por algo es más sabio verle en acción, si es que su potencial no sean más que espejos y humo, Keh heheheh >Tus recuerdos son bastante vagos y difusos, no recuerdas casi nada desde que llegaste a la ciudad, más allá de haber llegado en plena noche, y que la luna se encontraba en su punto más alto... Una densa niebla se iba alzando por todo el camino, y unas muy débiles luces a duras penas iluminaban el camino... Tu cabeza duele, y que no se diga de tus oídos, pues los mismos continúan zumbando, tras quien sabe cuánto tiempo desde aquel momento... Aquella voz apenas y lograba romper con aquella excruciante monotonía zumbante, proveniendo de algún viejo a quien no recuerdas haber visto en algún momento, más su recuerdas algunas punzadas a través de tu cuerpo, y una especie de habitación apenas iluminada por una vela... Una mano casi esquelética te había agarrado en repetidas ocasiones la cara, sus intenciones completamente desconocidas, más si había alguien más o no con aquel viejo, era completamente desconocido... Capaz y estaba hablando solo con el mismo... ¿Era idea tuya, o solamente estabas sintiendo dolor en cualquier parte de tu cuerpo, a excepción de tus extremidades?... >Quien sabe cuánto tiempo había pasado, pero brevemente recobrabas la conciencia, encontrándote atado a alguna especie de camilla, dónde ni siquiera podías voltear a mirar, pues tenías una correa firmemente atada en tu cuello, y otra en tu frente, que impedían que pudieras mover la cabeza a cualquier lado, y de la misma forma, no sentías tampoco tus manos o tus brazos, intentando excruciadamente, pero sin logro alguno, poder moverlos. >Con cada parpadeo que dabas, unos extraños seres enanos iban apareciendo en pares: Primero uno, luego dos, luego cuatro, luego ocho, y así sucesivamente, hasta formar una pequeña legión que se subía encima de aquella camilla, y se subían encima tuya, sus pequeños dedos con enormes yemas toqueteando y agarrando cada parte de tu cuerpo, haciéndose su presencia cada vez más pesada, al punto en que inclusive te costaba respirar debido a la cantidad de seres que allí se encontraban... Algo murmuraban, algo decían, pero no se les entendía absolutamente nada... Lo último que recuerdas, fue un par de manos agarrando tu cara, yendo directamente a por tus ojos, y como un par de estos dedos se metían dentro de las cuencas de estos mismos. Por más que intentabas abrir la boca y gritar o decir algo, palabra alguna no salía, ruido alguno no se escuchaba, más tu aliento si que se escapaba de tus pulmones... ... La noche apenas comienza, Joven Cazador, y las presas esperan allá afuera... No me decepcioneis, pues vuestra vida es más singular de lo que vos pensáis... ... >Quien sabe cuánto tiempo más paso, pero una voz mucho más suave retumbaba en tus oídos, proveniente de alguien joven, asemejándose a un susurró dentro de tu oído... Conforme aquello se iba alejando en la absoluta oscuridad y vacío, ibas recobrando una vez más tus sentidos, al punto en que abrías de golpe los ojos, siendo asaltado de inmediato con el brillo de la luna, que se iba colando a través de un ventanal, no muy lejos de donde te encontrabas... Yacias tendido encima de una camilla, tu ropa, contra todo pronóstico, se encontraba en pristinas condiciones, a pesar de que dicha camilla estuviera manchada de algún líquido rojo carmesí... ¿Sangre, probablemente? >El lugar en donde te encontrabas, estaba rodeado de muebles viejos, algunos incluso con polvo, y una vela que ya se encontraba en las últimas, siendo iluminada por una muy débil llama al borde de apagarse. Así mismo, había lo que parecía ser equipo médico o de operación, seguramente estabas en alguna sala de quirófano, pero... Habían libros, montones de libros, y varias camillas más, algunas completamente destapadas, otras destendidas, otras incluso parecían tener a más personas allí... >Era de noche, y estaba golpeando una fresca, o mejor dicho, helada ventisca que calaba hasta adentro de los huesos, no muy lejos de ti, estaba un escritorio con una lámpara sin encender, bordeado este mismo escritorio con un montón de libros abiertos, semiabiertos, y desordenados, así como un montón de manuscritos manchados con tinta... Y en medio de todo, una especie de carta con un sello, no muy lejos de este mismo, estaba una puerta a medio abrir, que daba hacia quien sabe dónde... >Y dónde, era el término correcto: ¿Dónde... Te habías metido?...

>>94051 <Una voz me despierta. Donde estoy.... Donde estoy donde estoy???? Mis pupilas se ensanchan tanto que mis ojos quedan totalmente negros, estaba asustado, asustado de la confusión, no sabía quién era, donde estaba, qué hacía y que me sucedía. Intento moverme con todas mis fuerzas, usar todos mis músculos para forzar lo que sea que me estaba aprisionando aquí, pero... No podía moverme. "(Espera espera espera!)" <Aunque tratara no podía moverme, aunque rompiera mis cuerdas bucales en mi mente mi boca no se abría, estaba totalmente paralizado desde las puntas de mis pies hasta mi cabeza. El pánico empezó a aferrarme, trataba de buscar información del ambiente, pero mis ojos me fallaban,... apenas podía distinguir lo que me aprisionaba en esta especie de mesa, y cuando las cosas no se podían poner peor, los veo. "(NONONONO NONONO SALGAN DE ENCIMA SALGAN DE ENCIMA)" "(ESTÁN POR TODAS PARTES, POR TODAS PARTES, SUÉLTENME SUELTEMEEEE)" >Miles de criaturas salidas del mismísimo averno salían de la oscuridad para atormentarme, buscando venganza, mi momento había llegado, el día del juicio por mis pecados. Ellos me rodean y van poco a poco invadiendo mi cuerpo, yo estaba sumamente atemorizado, aterrado, intentando usar toda mi fuerza de voluntad para salir de aquí, solo logrando que se marcan las venas de mi cuerpo, era el fin. "......" <Pero... No morí... No fui torturado, no sufrí las consecuencias de mis actos, solo... ¿Desperté?. Una voz juvenil como susurro la había llamado y mis ojos se abrieron ya sin miedo, estaba completamente intacto y esos seres de pesadilla ya no se encontraban a mi alrededor. Otra vez esas pesadillas, no dejarán de atormentarme hasta la tumba, miro a mi alrededor, estaba en una especie de laboratorio, ¿dónde mierda me había metido? Suspiro y me levanto de la cama, mis venas dolían como el infierno, agarro la lámpara y observó la habitación a detalle, sus libros y cualquier mierda que pueda ser de utilidad.... Mis instintos estaban alerta, aquí debían haber más personas.. Tras analizar este lugar sigo avanzando por el edificio. "Upshsh cof cof cof haha cof cof hahaha *vomita*"

>>94184 https://youtu.be/cKk6XqcmB4Q?si=XNP_D9YCveW0A6XE >Ni corto ni perezoso, de inmediato te pusiste de pie, posando tus pies sobre el suelo de madera, que de inmediato soltaba un pequeño rechinido que retumbaba por toda aquella habitación. A tu cuerpo le costó un poco recobrar completamente su forma, pues tus piernas tambaleaban de buenas a primeras tras bajarte de la cama, y que decir de tu cabeza dando vueltas igual que el mundo, hasta pasados al menos unos 5 segundos. >El aire hedia a bastante humedad, y si algo no se escapaba de tu ya experimentada nariz en cuanto al Defilamiento de la carne, era el hedor a sangre que se mezclaba con la humedad de aquel lugar... Era... Raro, demasiado oxidado, cual sangre recien derramada, más se veía ya coagulada, seca, incluso negruzca en algunas ocasiones... Bolsas con sangre colgaban de unos cuantos soportes, estando algunas de estas conectadas hacia algunas camillas, más se hallaban completamente inmóviles, pues no había goteo alguno >Jeringuillas yacian expuestas encima de algunos aparatos quirúrgicos puestos al lado de las camillas, algunas de estas jeringuillas aún con sangre, cuyo color cobrizo brillante eran indistinguible señal de que está se hallaba en pristinas condiciones, aún a pesar de como se encontraba aquella sala... ¿Acaso era sangre tuya?... >Encima de la mesa, los numerosos libros allí abiertos hablaban principalmente de la propia anatomía humana, específicamente, en el sistema circulatorio, y con lujos de detalles, estaban marcados diversos sitios en el cuerpo dónde la extracción y transfusión de sangre, era mucho más óptima para la sintetización propia del cuerpo, su conducción, y aprovechamiento al por mayor. "Si bien aún yacen muchos secretos desconocidos sobre el funcionamiento de la sangre ajena en el cuerpo humano, al momento de tratar heridas, enfermedades, o incluso casos extremos de necrosis, no hay que negar tampoco el hecho de mantener un uso moderado de estás transfusiones, pues, en pacientes especiales, se han observado casos repentinos de locura, más sin embargo, estos mismos ya habían tenido antecedentes con asuntos hereticos" Anotacion debajo de un dibujo del cuerpo humano >Junto con ello, una pequeña carta escrita a mano se escurría y quedaba delante tuya "Buscar a la sangre pálida, para trascender la cacería" Carta Misteriosa con escritura familiar >La lámpara te servía bastante bien para poder iluminar tus pasos con más claridad en aquel extraño lugar, más sin embargo, alguna otra cosa que tuviera mayor utilidad, no encontrabas, a excepción de un mísero bisturí, y Armandote de valor, te adentrabas más en aquel extraño lugar. Abriendo la puerta que conducía hasta la oscuridad, solamente el ligero crujir de la perilla, era lo que rompía el silencio absoluto que reinaba sobre aquel lugar. ... >Atravesando el portal de la puerta, un largo pasillo en completa oscuridad te arropaba, siendo esta misma trivializada gracias a tu lámpara, y con ello, continuando tu camino, lograbas darte cuenta de algo curioso: A comparación de aquella sala en dónde te encontrabas, el suelo del pasillo se encontraba en pristinas condiciones, a duras penas con algo de polvo que fácilmente se podría limpiar dentro de 2 o 3 horas a lo mucho. Aquel mismo pasillo, poco a poco se iba iluminando un poco más, y, llegado hasta cierto punto, aquel pasillo se volvían escaleras, siendo estás iluminadas gracias a un hermoso y fino candelabro puesto en el techo. Tus pasos rechinaban al contacto con la madera del suelo, e incluso un par de estás escaleras, al momento en que posabas tu pie encima de estás, se empezaban a mover, ocasionando con esto que un par de escalones terminasen desmoronandose, abriendo un pequeño Boquete debido a esto, y terminando quien sabe en dónde... >Al final de las escaleras, el lugar se iba iluminando mucho más, gracias a más candelabros, e inclusive, pequeñas instalaciones eléctricas que si bien, dejaban un poco que desear debido a su poca luminidad, era peor andar en oscuras al fin y al cabo. >En el suelo, un par de tablones de madera se hallaban rotos y hundidos, con algunas señales de sangre encima de los mismos, y cuando te acercabas un poco a esto, unas cuantas gotas de sangre caían sobre tu cabeza... La habitación de adelante era una sala más grande, conduciendo está hacia una gran escalinata hacia el fondo a la izquierda, no sin antes pasar por un par de camillas más y bolsas con sangre a media capacidad. Hacia la derecha, otra escalinata se lograba ver, ambas separadas por lo que parecía ser una columna desde donde te encontrabas >Algo curioso, era que tus pasos se habían detenido, más sin embargo, el chillido de la madera seguía escuchándose... Seguramente aquel edificio era ya bastante viejo, y debido a la humedad, de a poco estaba empezando a ceder... >...Aunque no recuerdas que tu respiración fuera tan... Fuerte...

>>94182 La filosofía de la mente trata de preguntas generales sobre la naturaleza de los fenómenos mentales y su lugar es una descripción o explicación sistemática del mundo o, al menos, espera acercarse a tal descripción, según algunos libros, la mente es un órgano que se ocupa de las ideas puras y era considerada completamente separada del cuerpo, mi padre dijo que yo tenia una, bajo este concepto mi mente podría ser capaz de sentir miedo pero la falta de sensaciones pueden bloquear este pensamiento. Admiración, adoración, aprecio estético, diversión, ansiedad, asombro, incomodidad, aburrimiento, calma, confusión, anhelo, aversión, dolor empático, embelesamiento, envidia, emoción, miedo, horror, interés, alegría, nostalgia, romance, tristeza, satisfacción, deseo sexual, simpatía y triunfo, son 27 las emociones identificadas y que no sea capaz de sentir ninguna de ellas solo me demostraba mis razones para estar aquí. ¿Qué es lo que me podría pasar en esta situación? Me lo preguntaba, entendía que podía estar en peligro, si mi cuerpo era destruido sería incapaz de alcanzar mi meta, lo entendía pero... No sentía nada, ni al ver aquellas extrañas criaturas cuya existencia no era mejor que la mía, ni al escuchar y ver a esa persona... Mi respiración era tan helada como la misma ventisca así que el vaho no salía, no era la mejor situación para alguien como yo, cuerpo se pudre, engarrota y deja de funcionar y es tan peligroso estar dentro como afuera pero ahora... ¿Donde estaba? El camino había sido complicado, no se podía esperar menos entre ladrones y estafadores pero no pude ver en que momento termine aquí, al menos en este momento podía pensar que quizás estaba en mi destino, eso era lo que pasaba por mi cabeza mientras me sentaba y miraba a mi alrededor observando un lugar no tan diferente al taller de mi padre. Deje caer mi cuerpo posando los pies en el suelo y sacudiendo cualquier rastro de polvo que pudiese haber cargado, el dueño no se encontraba en ese lugar, necesitaba un poco de conocimiento to antes de avanzar, tendría que haber mucha diferencia entre un estudiado de mis tierras a un estudiado de Yharnam, sería mi primera pista por lo que decidí no tocar nada para no molestar, después de todo: Eso es lo que haría un niño bueno. Mirando hacia aquella puerta en la lugre obscuridad me dirigi a ella buscando alguien.

>>94225 https://youtu.be/6jckPhagaSQ?si=AEXK1KXMwnfMvFbK >La recuperación de tus 5 sentidos no fue demasiado tardía, más sin embargo, fue un leve contratiempo a la hora en que pusiste tus pies de vuelta sobre la tierra: Perdida casi inmediata del equilibrio, seguida de visión borrosa y pesar corporal completo, probablemente era falta de movimiento después de una larga temporada, acompañada con engarrotamiento del cuerpo, pero... ¿Cuánto tiempo habías estado inactivo entonces?... No podía haber pasado demasiado desde que tuviste aquella extraña visión, ¿no?... >Nada más que mero polvo se posaba sobre tu cuerpo, y solo era cuestión de unas cuantas sacudidas para que el mismo abandonase tus ropajes y tú cuerpo, y al levantarte, te dabas cuenta de que no había correa o soga alguna que tuviese retenido tú cuerpo como en aquella extraña visión. La camilla en dónde te encontrabas, no obstante, si que estaba bastante sucia, incluso con algunas manchas de sangre en la misma que empañaban su blanquecina tela. En tus brazos, curiosamente, habían unas cuantas punzadas de jeringuillas, y en una mesita no muy lejos de donde te encontrabas, había una buena cantidad de inyectadora rotas, otras con las puntas torcidas, e incluso, algunas todavía con sangre, aunque está ya estaba coagulada para estas alturas. Un pequeño cosquilleo, no obstante, aquejaba ocasionalmente tu muslo derecho >Dejando todo aquello de lado, la lámpara se encargaba de iluminar parcialmente aquella habitación, al igual que una mesa con unas cuantas anotaciones y libros, detallando estos mismos el cuerpo humano. En estos dibujos, habían círculos marcados en rojo en diversas partes del cuerpo humano, específicamente, dónde se suponía que se encontraban las venas y arterias principales del cuerpo, aunque... Una muy buena parte de estos círculos, se encontraban también tachados con una X, siendo el único circulo sin tachar, aquel que se posaba encima del que era el muslo posterior derecho en el cuerpo humano, justamente, dónde aquel cosquilleo te aquejaba desde tu despertar. Junto con todo aquello, había una pequeña carta. >El resto de la habitación, estaba repleta de camillas similares a la tuya, algunas de estas vacías, otras con cuerpos conectados a viales de sangre, que ejercían el oficio de la transfusión de esta misma, más no había movimiento alguno... Curiosamente, algunas de estas camillas, se encontraban destendidas. >Obedeciendo, pues, tus instintos primarios, decidias aventurarte hacia afuera de aquella extraña habitación, dirigiendote hacia la puerta, siendo acompañado únicamente por el crujir de la madera del suelo, al momento en que tus pasos chocaban contra esta misma... Poco después, la puerta crujió, al momento en que grabas la perilla, y la abrías de par en par... Casi completa oscuridad fue lo que te siguió, siendo la única fuente de luz, una pequeña lámpara al final de lo que parecía ser un pasillo, que se encontraba en excelentes condiciones, a comparación de la habitación donde habías despertado. Una pequeña seguidilla de pasos escuchaste en lo que te aventurabas por aquel extraño pasillo, desapareciendo con la misma repentinez con la que de habían escuchado... Mientras caminabas, del techo un poco de polvillo cayó encima tuya... >Llegado al final del pasillo, aquella pequeña luz al final del túnel, te permitía observar una puerta más, misma que contaba con los cristales rotos, y algunas piedras en el suelo, así como también una rara especie de arañazos, seguramente provocados por golpes o los impactos de las piedras al chocar contra aquella vieja puerta de madera... Al otro lado de la misma, podías llegar a ver un bonito candelabro que ampliaba el espectro de la tenue luz que había por aquellos lares, y detrás de este, un vitral que daba hacia afuera, ayudando a que la luz nocturna pudiera penetrar dentro de aquel raido edificio... Eran altas horas de la noche, a juzgar por su brillo... >Aquellas puertas crujieron aún más fuerte que la anterior, y tuviste que hacer un pequeño esfuerzo extra para poderlas abrir de par en par, puesto que a sus pies, algunos pequeños escombros yacian y dificultaban el paso: Pedazos de madera, algunos palos, e incluso unas cuantas rocas de considerable tamaño, mismas que, debido al empuje para abrir la puerta, terminaban moviéndose y caían hacia el frente, hacia una escalera no muy grande que daba hacia el piso de abajo... Tanto habrá Sido el peso de la piedra, que conseguía romper parte del escalón, cayendo quien sabe cuántos metros, puesto que no se escuchó golpe alguno, si no hasta 5 segundos después... El final de la escalera, conducía hacia una enorme sala, con numerosos aparejos y útiles médicos, bolsas de transfusiones vacías, y... Inciensos ya consumidos, una muy buena cantidad de ellos, puestos todos en el portal, quedando tan solo su ceniza... >Era extraño... Pero podías jurar que estabas escuchando una respiración procedente de aquella sala... De seguro habría alguna persona más en tu misma situación... ¿Cierto?...

Bumpito

Bumpito

me da pena ver un rolmuerto kek, creo que mandare ficha

>>94510 No hay problema, aún hay cupo por si gustas

>>94530 ¿Aun sigues ahí OP?

>>94977 Yep, estoy todavía vivo negrito

>>94980 >Nombre Eva del Oeste >Edad 21 >Sexo (Inserte chiste de pipi y almeja) >Historia La vida no la amamanto de puros talentos y aventuras, desde que recuerda encontró más de una piedra en su zapato. Creció privada del privilegio de ver el mundo exterior, totalmente ciega fue recluida a escasas labores hogareñas dentro del seno de una familia religiosa. Su vida se proyectaba monótona y muriendo como poco más que una solterana, muy seguramente limpiando la caca de los pañales de sus padres cuando ya sean lo suficientemente viejos. Cansada de esperar un milagro de los dioses, se armo de hogazas de pan y mucho valor para emprender su viaje a yharnam, la ciudad donde la palabra: imposible; esta prohibida. La única idea que conserva en mente es valerse de su oído y caridad ajena para llegar a uno de los prodigiosos médicos de los que tanto hablan los viajeros que provienen de esta ciudad. >Pic

>>94221 Me giga morí, cuando pueda mando turno

>>94982 Perfecto negro, en un rato te respondo apenas llegué a casa >>94988 No hay problema negro

Respuestas entre hoy y mañana negros, se me complicaron cosas IRL, ya tengo escrito la mitad del turno de Eva la singularidad del ser OP es real después de todo

>>94982 >Quien sabe por cuánto tiempo vagaste por aquellos paramos sin rumbo fijo aparente, quien sabe exactamente con cuántas personas te encontraste de camino hacia aquellas tierras, pero no fueron pocas... Voces de todos los tonos, grosores e intenciones al mismo tiempo fueron y vinieron durante tu travesía... Muy atrás quedaron las voces de tus familiares, pues habías aprovechado la oscuridad de la noche para escaparte hacia aquellas tierras milagrosas, después de que numerosos rumores acerca de ancianos paraplejicos, niños con 6 dedos, e incluso antiguos soldados sin ojos, volviesen a la antigua gloria de sus dorados días... >Ahora, después de mucho, muchisimo caminar, habías llegado hacia alguna ciudad, dónde fuiste acogida por un sujeto, probablemente de avanzada edad debido al tono rasposo de su voz... Los detalles desde que llegaste a aquella ciudad, son muy difusos, pero casi jurarias haber llegado a escuchar voces susurrando en tu oído, a pesar de no haber sentido a nadie cerca de ti, inclusive pudiste haber jurado escuchar disparos, aullidos, gritos, madera siendo quemada, e inclusive manos acariciando tu rostro... Lo último que recuerdas con ciertos detalles, es haber estado sentada en una silla un tanto alcolchada, pero con sobresalientes metálicos clavándose en tu cuerpo, y siendo después acostada hacia atrás, como si aquella silla fuera en realidad alguna especie de sillón... El ruido de la madera quemándose en una chimenea, era lo que ayudaba a esconder un poco el tintineo de alguna jeringuilla siendo golpeada, así como también la voz de tu acompañante, quien, fungía como médico en aquella ocasión. Un ejemplar... Curioso, cuánto menos, pero no dudo que esta operación sea un completo éxito... El pago será muy minúsculo, a comparación de la habilidad requerida en esta ocasión. Sea decisión vuestra ver lo que os espera delante, queda a vuestra disposición, pero no hay nada que me llene más que ayudar a una pobre alma con un aflijo tan terrible, heheheh... No te preocupes, solo sentirás una leve punzada a un lado de tu cabeza, y todo pasará, pero el contrato deberá a cumplirse a cabalidad, cuando llegue el momento, keh heheheh >Primero fue una punzada, luego, fue un completo ardor por toda tu cabeza, que poco a poco fue trasladándose hacia tu cuerpo, hasta que llegaste a sentir un leve resoplido en tus ojos... ¿Que había Sido eso?, Tal vez era un misterio que nunca sabrías... >El tiempo pasó, exactamente cuánto, no sabes exactamente, pero, por primera vez en prácticamente una eternidad, hasta donde recuerdas, podías llegar a dislumbrar algo de Luz, colores para ser más específico, formas incluso, y aunque la imagen todavía era algo borrosa, se contraponía a la absoluta oscuridad que había dominado tu visión... Estabas viendo, no sabías cómo, pero de alguna forma estabas viendo, y aún tú cuerpo necesitaba acostumbrase al hecho de que estuvieras viendo formas tomando poco a poco forma... Solamente podías mover la cabeza, no obstante, tú cuerpo estaba completamente quieto, apresado por una especie de correa que no dejaba que te movieras a ningún lado... Un rechinido se escuchó no demasiado lejos de donde te encontrabas, así como un resoplar proveniente de algún animal, que se sacudía sus pulgas, por cómo sonaba su cuerpo al moverse... No lo veías muy bien, era una forma algo extraña, era una mancha carmesí con tintes negros, ¿O tal vez era al revés?... Lo cierto era que sus resoplidos se escuchaban más y más cerca, y una mano muy pesada se colocaba encima de tu pierna, y después otra encima de tu torso, cortandote casi de inmediato la respiración debido a su peso, acompañado de un fétido hedor que asaltaba tus fosas nasales... >De pronto, un extraño brillo amarillento engulló a aquella mancha carmesí, siendo acompañado de horrendos aullidos, seguidos de un duro golpe contra el piso, y el rechinar de tablas de madera rompiéndose de inmediato... Por si fuera poco, unos murmullos ininteligibles empezaron a resonar al momento en que aquella mancha se había retirado, siendo ahora, manchas bastante claras que tenían formas circulares, y lo que en un momento empezó siendo apenas un par, de pronto se volvió un enorme número difícil de calcular, cuyas pequeñas manos atrapaban todo tu cuerpo, y finalmente, un par de estás toqueteaban tu cara, tus fosas nasales, y, finalmente, se afincaban más que nada en tus cuencas ópticas... La oscuridad, una vez más, retomo tu vista. ... La noche apenas comienza, Joven Cazadora, y las presas esperan allá afuera... No me decepcioneis, pues vuestra vida es más singular de lo que vos pensáis... ... >Poco a poco comenzabas a recobrar otra vez el sentido, acompañado de un inmenso dolor de cabeza que, conforme pasaban los segundos, se iba apaciguando. Te encontrabas acostada en lo que parecía ser una rara especie de camilla, con algunas manchas carmesí que en tu vida habías visto... Visto, esa era la palabra clave: Podías ver finalmente, después de toda una vida dependiendo del resto de tus sentidos o de terceros para poder moverte, tus ojos al fin funcionaban, aquel extraño hombre, haya hecho lo que haya hecho, había hecho un auténtico milagro, y te dió aquello con lo que careciste desde el día en que te concibieron... El lugar en donde estabas, era una especie de cuarto grande, aunque algo oscuro, con unas cuantas cosas luminiscentes que emitían su propio brillo, aquello de seguro tenían que ser aquellas famosas "lámparas" que iluminaban las más oscuras noches de tu pueblo. Curiosamente, no hay nadie más en dónde tú te encuentras, solamente la oscuridad, el leve brillo de las lámparas, y, como no, un suave y tenue rayo procedente desde arriba, con tonos grisáceos... ¿Aquello tal vez era la famosa "luz lunar"?... Probablemente >Tú cuerpo, poco a poco, se iba recuperando de aquel profundo sueño, al igual que el resto de tus sentidos, y tu nueva visión, poco a poco, se iba acomodando y acostumbrando, al igual que el resto de tu cuerpo, las náuseas primerizas ya se estaban disipando para ese momento, aunque te tomo unos cuantos minutos en dónde estuviste sentada, e hiciste movimientos suaves y cortos para no terminar en el suelo... >En aquel lugar, se encontraba un montón de muebles de madera algo desordenados, así como también otras camillas como la misma en dónde te encontrabas ahora mismo, algunas con las fundas completamente manchadas de aquel extraño carmesí, y otras desordenadas, aunque algunas parecían tener a personas durmiendo debajo de ellas, debido a que tenían extrañas formas... Unas cuantas agujas se encontraban a tu costado, con algunas cuantas pequeñas gotas de líquido rojo, quien sabe con qué, y también, un sinnúmero de cubiertas con hojas blancas, de seguro tales cosas eran los llamados "libros", más... ¿Habría siquiera alguno que tuviera relieves para poder leerse?... >Al fondo del todo, una especie de pedazo tallado con una barrita de metal, era lo que daba el paso hacia afuera de aquella habitación... Aunque con todo y todo... ¿Dónde... Era que estabas, para empezar?... ¿Y a dónde se había ido aquel extraño anciano de antes, o por qué estás sola?...

Bumpito