>>37352
Esta bien negro, bienvenido, y espero que te guste el rol.
>>37354
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"Kurosawa... Kurosawa... Hmm... En estos años y épocas, solo los niños ricachones conocen a Akira Kurosawa... Hmm... Hmm... Hmm..."
Aquel tipo entre dientes, comenzó a murmurar cosas apenas audibles, cosas que, más bien, no eran más que meros ruidos hechos al azar mientras hacía lo que estaba haciendo. A través del teléfono, se escucho una silla moviéndose, seguido del suspiro de tu interlocutor al otro lado de la línea, haciéndose un poco más claro el ruido del televisor, pudiendo escucharse a través del auricular del celular, la voz del locutor en ese momento, al igual que un gruñido más claro por parte del hombre
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"Por dios Rodríguez, y, ¿Que tanto cuesta mandar esa puta bola al jardín derecho y asegurar al menos 2 bases sin mucha complicación, en lugar de intentar un disparo al jardín izquierdo para conseguir 3 bases?... Estos beisbolistas de hoy en día, en serio... Por eso los putos Carabineros están a mitad de la tabla"
De pronto, hubo silencio por su parte, escuchándose de vuelta solo el televisor y el ventilador resonando... El primero, poco a poco empezó a sonar cada vez más bajo, cada vez más distante, rompiendo poco después el silencio aquel hombre
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"Entonces, la tal Yuko Kurosawa, cuyo padre se apellidaba Kurosawa, ¿No?... Hmm... Y dices que este número estaba entre las pertenencias de tu padre..."
Entre sus palabras se alternaban sonidos de electrodomésticos siendo usados, más en específico, un microondas y una especie de taza.
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"Hmm... Supongamos que conozco a tu padre por alguna razón, ¿No?... Bueno, que lo conozca por alguna razón buena, y no porque debiera dinero, o fuera alguien ligado de mala forma al negocio... ¿Para que estás llamando o que buscas, si puedo saber?"
La campanilla del microondas sonó al momento en que terminó aquellas palabras, siendo abierta no mucho después la puerta del mismo, y, en consecuencia, escuchándose el sorber del líquido que había en la taza, a través del auricular del teléfono
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"*Puff* Esto si que esta bueno..."
No mucho después, otra vez, el sonido de la silla moviéndose.
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"*Mhh* Mira, Yuko Kurosawa, hagamos esto... Sea lo que sea que quieras, ven directamente al negocio, obviamente sin compañía, y me dices que es lo que necesitas, ya que este tipo de cosas no me gusta demasiado hablarlas por teléfono, nunca se sabe si los azulados están por ahí metiendo sus orejas en las conversaciones de la gente, ¿Capicci?... Si puedes traer algo que haya pertenecido a tu padre como... Yo que se, alguna foto o algo, capaz y sepa quién demonios era, que muchos asiáticos han venido, pasado, y abandonado este lugar, ¿Okey?"
De vuelta, hizo una breve pausa, con el fin de seguir bebiendo aquella cosa
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"*Puff* Siempre y cuando no vengas a hacer alboroto, no pasara nada... Es demasiado temprano, y de paso es mi día de meditación, como para que haya alboroto por este lugar... Te enviaré la dirección en un mensaje en un momento, ¿Okey?... Okey"
>>37352
>>37240
Si vas a usar a John como pic de personaje, me va a costar demasiado no meter a un gato naranja por ahí kek
Otro dia mas en la gran ciudad, otro día más lejos de la granja que te vio nacer y crecer, al igual que las 20 generaciones anteriores de tu estirpe que se criaron en el arte de la ganadería y agricultura. El mundo con el pasar de los años, fue sufriendo constantes transformaciones por efecto de la rampante contaminación humana, los cambios climáticos, la automatización agricultora y campestre, y, como no, el "Nuevo Oeste", como fueron llamados aquellos oscuros tiempos de revueltas donde las milicias armadas necesitaban campos y campos agricultores para poder dar alimento a sus soldados, y cultivar distintos opioides, con el fin de financiar su guerra gubernamental por el control de los distintos estados del medio oeste estadounidense... Al menos fue algo más suave que Las Vegas, o mejor dicho "Paradise City", ciudad que hoy en día está hasta el tope con la corrupción y enormes cantidades de dinero dentro de la misma, siendo vigilada constantemente por mercenarios, milicias, e incluso dicen que hay Veteranos de Guerra entre las filas Paradisíacas, con el único y mero fin de mantener a raya a las distintas pandillas del desierto, en donde se hace la ley bajo su mano... ¿Como lograste esquivar el peor de los destinos de los visitantes de New Angels cuando vienen por la ruta menos segura pero más barata de toda América?... Bueno, dando una parte de tus bienes monetarios pacífica y concienzudamente a aquellos criminales, a cambio de su buena fe de que no terminarias siendo puesto como esclavo de algun barón del desierto, o vendido a los coyotes al sur de la frontera como miembro de algún cartel de Baja California
en un mundo alterno, John hubiera estado en su propia versión de Mad Max/New Vegas protofuturista.
¿Que destino podría ser entonces peor que la muerte?... La vergüenza y humillaciones públicas, trabajando en una oficina (Pic 3) de una de las tantas compañías que tenían su sucursal administrativa en New Angels, siendo tu puesto uno específicamente diseñado para que una máquina pudiera hacerlo sin necesidad de trabajo humano detrás, llevando entonces esto a la siguiente pregunta: ¿Por qué demonios contratar a un campesino para hacer el trabajo de una máquina?... Como se dijo anteriormente, siempre se necesita a algún bufón por el cual sacar risas a costa de, y para tu mala fortuna, tu trabajo era básicamente ser el bufón del jefe que estuviera de turno...
Pero hey... Al menos al ser el único humano trabajando en uno de los departamentos relegados a máquinas, podías cobrar una fracción de lo que ese departamento estuviera cobrando si hubieran humanos operando... Y el café era una delicia... Y al menos en el piso de arriba, solían haber bastantes mujeres para alguna que otra ocasional charla, por buscar más tinta, hojas, o material de papelería para que aquellas máquinas pudieran emitir sus reportes correspondientes al final de cada jornada laboral. De vez en cuando escuchabas rumores de que alguna te tenía el ojo puesto, pero, por como estaba tu suerte con las mujeres, capaz y solo eran mentiras blancas para que siguieran entreteniendose a costa de tus fallos y rechazos.
Un trabajo duro, aburrido, y probablemente mal pagado, pero... Que servía para poder sobrevivir... Peor era estar como indigente sin poder pagar el techo donde dormías (Pic 1)... Y al menos, en el piso en donde te encontrabas, las vistas hacia las afueras de la ciudad, daban un mínimo atisbo de esperanza de que todo aquello fuera a pasar algún día, y mejorase tarde o temprano... Con la ocasional compañía de productos de belleza y cuidado femenino de neón, cuando estaba a punto de anochecer... (Pic 2 y 4) De vez en cuando los anuncios mostraban cosas acerca de una "¡Nueva y estupenda máquina de memorias y sueños personalizados!", Cuya llegada a las tiendas físicas sería próximamente, como parte de una campaña de marketing y testeo, y a las tiendas digitales, vendría dentro de 3 meses...
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Por lo menos no muy lejos de tu casa, había un bar, que parecía ser frecuentado de forma regular por algunos de tus compañeros de trabajo en otros pisos, el cual le llamaban "El McDonald de los bares"... Por alguna extraña razón.
Para aquel momento, ya eran alrededor de las 4 de la tarde, y tu jornada terminaría finalmente en 1 o 2 horas más, siempre y cuando no viniese alguno de los jefes jodiendo a última hora, u ocurriese algún error con las máquinas, que te obligase a quedarte para asegurarse de que ellas mismas pudieran repararse solas, y si era muy grave, pudieras llamar a algún técnico mucho más capacitado...
Café caliente en mano, y tanto el tren como aquellos lujosos y novedosos autos voladores pasaban por el frente del ventanal de tu oficina... De seguro los anunciantes sacarían el día de hoy algún nuevo y estrebillante anuncio, o repetirían los 10 mismos anuncios de todos los días