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<En el Este de Europa
Una buena sopa caliente para poder iniciar el día, despertarse bien, y de paso, romper un tanto el hielo, algo que estaba haciendo mucha falta por aquel momento, pues, de seguro era algún efecto de cambio de horario, o efecto de madrugar a las 7 de la mañana, que tenía a buena parte de la mesa en silencio... Eso, o seguramente también el hambre, pues cada uno, a excepción del profesor, se estaba comiendo la sopa sin tardarse demasiado. Kafka, más bien, solo había pedido una taza de café por el aparente momento, acompañado de un trozo de pan relleno de jamón y queso, lo cual... Era un desperdicio, teniendo en cuenta el hotel tan elegante en el cual se encontraban.
>Kafka
"Curry... Desde mi viaje a la India hace un par de años atrás, no lo he vuelto a probar. ¿Tiene mucho picante, por casualidad?"
El hielo entre ambos se rompía, más los 2 muchachos consigo, aún seguían ensimismados en su sopa, casi sin darle demasiada atención a ello... En el caso de la muchacha, más bien se servia otra taza de café, siendo con estás, ya alrededor de 3 veces que había hecho "Refill". Aprovechando la pequeña presentación del bueno de Lumenza, Kafka bajo la taza, haciéndola descansar sobre la fina mesa de madera tallada y decorada con barniz, colocándola encima de un pequeño portavasos antiderrames, justo al lado de unos cuantos cuadernos de anotaciones, y un par de libros de su pertenencia. Tras ajustarse los anteojos, retomo la palabra, poniendo ambas manos sobre la mesa, cruzando sus dedos
>Kafka
"Lamento profundamente no haber organizado de antemano una reunión mucho más formal, pues, este encuentro fue algo... Apurado, si se podría decir así, así que, permítame devolverle la cortesía de una debida presentación"
Su mano se estiró, abriendose su palma en el proceso
>Kafka
"Profesor Hans Kafka, mención honorífica en la Universidad de Berlín en Ciencias espaciales; y summa cum laude de la Universidad de Frankfurt, en mención de Física teórica y espacial... Y, como no, amante de una buena cerveza fría al término de las actividades diarias"
...Cualquiera que dijera que ese tipo tenía 33 años, era de seguro un mentiroso, si hasta en su cabello se le podía ver una larga cana enreversada entre sus mechones castaños... Pero, así eran las cosas, así como existía gente con 60 años encima, pero con apariencias de muchachos de 25 años, el estrés de la vida diaria universitaria, seguramente había hecho mella en su cuerpo y en su psique, como para que a su edad ya estuviera con tremenda cana en la cabeza. Por parte suya, el respeto hacia un colega, o mejor dicho, entendido en la materia, era relativamente palpable, algo que pues... Dejaba más o menos que desear por parte de la muchachita de piel pálida, quien estaba demasiado concentrada en más bien tomarse otra taza más de café, además de las que ya tenia encima, y más bien miraba a Dango desde que empezó a tomar café y este mismo se le salía de entre alguna que otra rendija por su cuello, como una especie de muñeco de trapo deshilachado, aunque este en específico, parecía más un "Pinocho femenino" que otra cosa... Curiosidad en su máxima expresión, después de todo, ¿Pues cada cuánto aparecía alguien así de pintoresco por esos lares?... Era algo digno de anotar como objeto de estudio en su bloc de notas, después de todo: Unos cuántos garabatos por aquí y por allá, la forma de aquella herida abierta, ¿Era capaz de sentir dolor debido a la temperatura del café, y el como este se escalaba a través de su-?
>Kafka
"-es Natasha Pashenko, es una de mis estudiantes en la facultad"
La tipa se quitó la taza de entre sus labios, y casi de golpe, dejaba la misma encima de la mesa, cerrando también su cuaderno de un manotazo, e incluso hasta llegaba a enderezar su espalda por un momento, para posteriormente, colocar ambas manos también encima de la mesa, casi imitando a Kafka, aunque de una manera algo más... ¿Tosca?... Si es que se le podría llamar así.
>Natasha
"Da, Pryvet"
Con todo aquel montón de cafeína que de seguro había dentro de su cuerpo, su cara más bien se veía cansada, seguramente no había dormido en lo absoluto, aunque ojeras no se le veía por ninguna parte... ¿Más bien desgano?... Quien sabe.
>Natasha
"...¿Es... Algún robot o mono superdesarrollado?"
Otro sorbo más de café, y, como no, le apuntaba directamente a la pequeña con su dedo meñique, sin quitarle el ojo de encima, abriendo de a poco su cuaderno una vez mas, ante la mirada algo fruncida por parte de su tutor. Al contrario, el otro muchacho que les acompañaba, no se dejaba presentar por parte de 3eros, y más bien se colocaba de pie, sonriente, y estirando la mano de igual forma.
>?
"Klaus Von Oberstein, es un enorme placer, profesor Lumenza"
El apretón venía, a su vez, acompañado de un suave agarrón con su otra mano, pináculo este de la cordialidad según cualquier manual de formalidad avanzado, como no, durando el agarrón el tiempo justo y necesario, casi exactamente lo mismo que acostumbraban a decir los libros de etiqueta, soltando este último suavemente la mano del bueno de Lumenza, e incluso se atrevía a medio acariciarle la cabeza a la pequeña Dango, aunque sin intercambiar demasiadas palabras con ella.
Dejadas atrás las formalidades, y tras que un mesonero se encargase de los platos sucios sobre la mesa, dejándola finalmente despejada, Kafka colocaba uno de sus libros encima de la mesa, abriéndolo de par en par, y con ello, mostrando una especie de mapa amarillento, algo manchado, obviamente golpeado por el paso de los años, más sin embargo, tal mapa había Sido creado por obra de un Cartógrafo en el siglo XIV, debido a su método de escritura, y, como no, por sus formas tan pintorescas en cuanto al dibujo y delineación con las plumas de la época.
>Kafka
"Iremos por el paso común turístico, pues no solo se evitará levantar sospecha alguna por parte de los guardabosques locales, o inclusive algún miembro de la Guardia Nacional, en caso de que hubiese alguno por los alrededores. Tras estar varios kilómetros adentro del paso turístico, llegaremos a un hotel que actualmente se encuentra en remodelación. Este será nuestro punto guía para partir hacia una antigua ruta minera que atraviesa directamente el hotel, y que hoy en día está rodeado de amplia vegetación, ya que no tiene uso desde, al menos, 2 o 3 siglos atrás, si no es que más"
En el susodicho mapa, habían también unos cuantos símbolos similares a runas, y, siguiendo los pasos de aquel mapa, se llegaba hasta una especie de... ¿Árbol enorme adentro de un bosque?... Aunque estaba rodeado de criaturas con largos dientes similares a cuernos, y como no, por no mencionar los violentos pasos del río que atravesaba la montaña, así como también varios riscos que, en el momento en que se hizo aquel mapa, habían Sido recreados, y que muy seguramente actualmente ya ni siquiera estuvieran existiendo.
>Kafka
"Deberemos evadir a toda costa continuar con el pasaje turístico, ya que más adelante, hay puestos de vigilancia por parte del ejército, debido a un derrumbe que hubo hacia no demasiado por esta zona, justo al mismo tiempo cuando se empezó a circular entre boca y boca que algo se encontraba adentro de la montaña. Dicen que se llegaron a ver humaredas rojas en el cielo, a pesar de que no haya ningún volcán activo, mucho menos volcán durmiente, en esta región"
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Habían otros dibujos más, como una especie de ojo bien detallado, aquellos monstruos extraños, pero también, una especie de cáliz, cofres y cofres amontonados acompañados de signos de palabras sin congruencia, y que más no iba.
>Kafka
"Cuando acabemos de comer, y se encuentren listos, partiremos de inmediato. Habrá que llegar equipo de acampada, pues los riscos y pendientes, al igual que la cara sur de la montaña, se ha erosionado mucho con el pasar de los años. Cuando encontremos el lago que se encuentra en el mapa, sabremos que vamos por buen camino"