Una perla de blanco irresistible a la vista rompe la lluvia tóxica. Las nubes que diluvian tal triste y rencoroso castigo sobre Shanghai tienen aún recuerdo de la polución con la que fueron azotadas de la tierra al cielo, resquicios de una etapa de desmesura. Tiempo atrás en Shanghai se vivió un periodo de máxima industria, sobreproducción venida a raíz de las nacientes tecnologías cibernéticas.
Todo comenzó con una curva exponencial en el perfeccionamiento de las inteligencias artificiales, momentos también donde científicos incursionaron en el campo de la neurociencia logrando comprender de forma nunca antes vista los fenómenos del cerebro y su rastro nervioso, generando así la mejor conexión entre humano y máquina. El biomecanismo fue la última pieza faltante para empezar una nueva era tecnológica. Esta era se caracteriza por brindar las mejoras o implantes cibernéticos que facilitó la vida humana de forma impresionante. Actualmente, el resultado de esta era de renovación tecnológica es una mayoría poblacional quienes cuentan con partes cibernéticas en mayor o menor medida. Las mejoras en formas de accesorio, herramientas o implantes se ven reflejadas en sentidos, motricidad y cognición aumentados.
China fue y sigue siendo un estado restringido y con fuerte presencia económica, no fue producto de la casualidad que aquellas empresas de dominio chino se enfocarán en el desarrollo y boom tecnológico del biomecanismo, pioneras hoy en día abarcaron abusivamente el mercado de los Aumentos y parte del código infalible IA durante varios años.
Durante el tiempo de hegemonía china (1ra y 2da década del siglo XXII) se llevó a cabo un descubrimiento que hizo temblar los cimientos del mundo tal cual se conocía en aquel momento. Se cuenta que la extensión de los aumentos, implantes venidos al caso, condujo a intervenciones cerebrales rigurosas, procesos de conexión humano-máquina que no se libraba de complicaciones para su tiempo. De esta forma, en un intento de minimizar los riesgos de manipular el sistema nervioso, científicos optaron por la idea creativa de usar las recién creadas memorias cerebrales IA para salvaguardar la mente, experiencias, memorias y todo lo que engloba funciones cerebrales del individuo a tratar. Se realizó el experimento sin esperarse a que el proceso de transferencia de estos datos resultaría en la muerte cerebral del sujeto, y tampoco se habría previsto la génesis de parámetros aleatorios en la memoria IA. Físicamente se experimentó una expulsión térmica inexplicable en los equipos utilizados.
Lo que se conoce como transferencia de individualidad, o como se teoriza locamente el desplazamiento del alma humana a una máquina a modo de contenido-contenedor, es una práctica que generó miles de dudas en ámbitos científicos y filosóficos ¿Si fue imposible copiar el patrón cerebral, entonces por qué se puede transferir? ¿Tal patrón vendría a ser el alma humana, y de ser así todo el tiempo tuvo una ubicación concreta en el cerebro?. Actualmente el fenómeno de Transferencia es considerado un tabú, exceptuando cierta parte de la antigua ciudad de Shanghai, donde los sindicatos poseen soberanía.
En Shanghai, durante los ultimos 10 años, el sindicato del 4to Vajra ha ejercido su poder haciendo uso de individuos mecanizados, cyborgs, controlando increíble gama de negocios entre los que se encuentran industrias farmacéuticas, textiles, químicas, automovilísticas hasta sus cimientos criminalísticos como la venta de armas, drogas y el tratado de personas. El sindicato se intenta hacer con el poder de un nuevo y revolucionario elemento cual es cibernético, entre androides, robots y el fenómeno de transferencia. No es impertinente el hecho que su objetivo está prácticamente realizado y habría sido realizado si el Estado Popular Chino no pusiese trabas.
Hace 3 años, por sugerencia del consejo partidista y aprobación del Jefe Supremo del Partido Popular Chino se añadió un nueva delegación que estaría conformada temporalmente por miembros adjuntos del Ministerio De Defensa Nacional y el Ministerio de Seguridad Pública está delegación formó las bases de lo que hoy sería el Ministerio de Seguridad Cibernética, una nueva extensión del poderío partidista, dedicada a la regulación de elementos cibernéticos y control de las actividades que engloba el biomecanismo. La sede central del ministerio se encuentra en Puxi, centro histórico de Shanghai.
Hoy es Junio del año 2125, en la ciudad plástica de shanghai, las nubes se disipan y con ellas la lluvia tóxica se atenúa y desaparece, La torre de la perla oriental reluce los rayos del sol que se abren paso en el cielo celeste de entrada al verano, por fin es posible distinguir las innumerables luces que adornan las calles de una Shanghai reinventada, Desde Changning hasta Yangpu, incluso desde el distrito Jinshan en la Gran Shanghai hasta el condado Chongming se vive la mañana, el sindicato pierde presencia mientras que los templos, que están allí desde ya siglos, reivindican su lugar en la ciudad.
La generosidad es una verdadera gema y cumple cualquier deseo. La compasión es satisfacción y su experiencia un tesoro infinito a compartir.
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